jueves, 23 de diciembre de 2010

Navidad 2010

Esta ocasión, haré uso de este espacio y no para externas mis mas sólidas dolencias y miserias humanas, no no no, lo que quiero expresar hoy es que esta navidad será diferente... ¿porque?

He aquí las razones:

Tengo un amor menos

Una lección de vida más

Otra herida en mi corazón

Muchas arrugas de risa nuevas

Mucho más por aprender

Algo por lo que pedir perdón

A mis amigos en todo momento (K: los amo con toda mi alma)

Muchas lagrimas perdidas en la almohada

Nuevos amigos (Gracias FESI)

Algo que recordar

Carcajadas guardadas en mi corazón

Alguien a quien extrañar


Pero aun con todas esas cosas, siempre he tenido la compañía de alguien, y Él no me prometió eternidad o amor a manos llenas, me lo dio des-interesadamente, desde que nos conocimos y sin pedir nada mas que fe: Gracias Dios por permitirme una navidad más a lado del mejor regalo que pudiste otorgarme, esa familia con la puedo enojarme casi todos los días, pero con sus acciones, me sorprender, animan y acompañan.

Muchas felicidades a todos aquellos que podemos gozar de estas fechas.

Pd. coman mucho pavo, romeritos, bacalao, ensalada, pollo, lomo o pierna, son deliciosos jaja




domingo, 5 de diciembre de 2010

En el olvidar...

Esquivando las luces del día, que han fatigado mi ánimo y mi fe, volviendo la cara a los recuerdos que he tirado al suelo, en un arranque de dolor, histeria, de profunda desesperanza.

Secando de mis ojos, las gotas que se vierten sobre las fotos, aquellas que capturaron un poco de esos, los días felices, donde estábamos inmersos en hermosas sonrisas, calurosos encuentros, que al mirarse hoy, tienen la frialdad del hielo, la aspereza del olvido.

Tratando de escuchar los cantos dedicados, las rosas almacenadas en aras de un nuevo comienzo, las promesas plasmadas en la mente, aquellas que se clavaron en el alma y se aferraban por hilos maltrechos al corazón, tuve que desalojarlas, arrancarlas a pesar de los inmensos dolores, pero era inútil conservarlas.

Respirando, hondo, cada vez mas hondo para no sentir que me faltase el aire, para no imaginar que las paredes se unen junto a mi cama para acurrucarme, para tratar de mitigar el frío que se siembra, pero no, el frío no viene de fuera, sino de mi propio cuerpo, casi inerte por unos momentos, un poco dramático y sombrío, pero no, no es duradero.

Cerrando las puertas, sufriendo las penas, tirando los días, matando sentimientos, que no deben vivir, o de lo contrario sufriríamos mas...